Las cosas no son como aparentan ser. La dificultad de llegar a comprender las razones de unos y otros sobre lo que es o no importante, varia tantas y cuantas veces queramos y como personas somos y estamos en este planeta. Es extraño pero nada o casi nada es visto y pensados dos veces igual...todos y cada uno de nosotros nos movemos por un montón de razones diferentes y a todos nos parecen las nuestras objetivas y neutrales, es curioso. Es sólo una reflexión sobre las cosas en las que trabajo últimamente: los Planes de Estudio de la Titulación de Maestro de Educación Infantil. Defendí y cada uno defendió, con la misma legitimidad que yo, aquello que creí y creyeron importante, lo hicimos todos los que allí estábamos...pero ¡qué diferencias entre nosotros! Y eso que se supone que todos íbamos a lo mismo. Al final un borrador con más de una incoherencia difícil de justificar y explicar.
Me consuela tener la posibilidad de poder responder personalmente cuando mis estudiantes me pregunten por esos “elementos” que chirrían en sus estudios y decir que fue a causa de una negociación o de la inercia de una política universitaria que no respeto a principios porque se obviaron...respuesta que a mi me parecerá insulsa...
No quiero ni imaginar su cara cuando la escuchen ...tal frivolidad no es propia de mi profe, de los estudios que curso...no es propio de una carrera de humanidades... pero es la pura realidad.
No es su cara de asombro sino la gran duda y el desencanto sobre quienes les enseñan lo que me preocupa...
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